Sufre amigo

Quiero tirarte al suelo, después de unas cuantas cervezas, quiero tirarte y que seas incapaz de resistirte. Quiero hacerte cosquillas por todos esos lugares que te ponen enfermo, quiero molestarte, mucho.
Quiero despeinarte cuando ni si quiera haya dado tiempo a que se seque tu gomina, quiero llenarte de barro cuando acabes de salir de mi ducha, sí, esa que detestas, y que después te seques con el rollo de papel porque no tengas toalla.
Quiero despertarte con un terremoto y otro y otro... y después mojarte toda la cara con la botella de agua que dejas en el suelo.
Quiero hacerte rabiar hasta cuando te haga el amor, no pienso parar de incordiar y de ponerte enfermo.
Quiero pelearme contigo, con almohadas, con espadas chinas, con botes de espuma de afeitar, con agua del mar, con arena, quiero combatir entre las sabanas y por supuesto derrotarte.
Me apetece, me has dado tú las ganas de querer comerte, pero no a besos, de comerte y que no importen tus gritos. Después, cuando ya no quede nada de ti, quiero rodearte con bolas decorativas inservibles para rematar toda esta locura.
Quiero preparar uno de esos platos que tanto te gustan y que  no puedas comértelo, que te quedes solo a unos centímetros de él, que te desesperes.
Y ahora pienso en lo infinitamente poco que te mereces estas torturitas, pero lo que me encantaría poder hacerte todas y cada una de ellas.
Sí, lo se,tu tambien lo sabes, tengo un lado oscuro al que debes temer... será que soy géminis, o quizá sea que hace tiempo que me hiciste perder los papeles y con ellos mi cordura.